La Comisión de Empleo del Congreso, con competencia legislativa plena, ha aprobado con los votos a favor del PP, PSOE, Unidos Podemos, Ciudadanos, PNV, ERC, el PDeCAT y Compromís la nueva ley de autónomos, que continuará su trámite en el Senado.
- La ley permitirá a 3,3 millones de profesionales cambiar hasta cuatro veces al año su base de cotización para adecuarla a sus ingresos. Hasta ahora sólo podían hacerlo dos.
- Al darse de alta o de baja en la Seguridad Social, los autónomos solo pagarán por los días que hayan trabajado, no por meses completos. Es decir, quien se dé de alta el día 29 de mes no tendrá que pagar por los 28 anteriores.
- Se amplía la tarifa plana de 50 euros de 6 meses a un año. Los emprendedores podrán optar de nuevo a esa tarifa plana si han pasado dos años desde que dejaron de serlo, y no tendrán que esperar cinco años para reemprender como ahora. Las mujeres que se reincorporen al trabajo después de la baja por maternidad también pagarán 50 euros como cuota a la Seguridad Social.
- También se pone fin a una vieja reivindicación de los autónomos, que podrán deducirse hasta 26 euros diarios cuando coman fuera de casa por motivos de trabajo.
- Los trabajadores autónomos podrán desgravar el 30% de los gastos de luz, agua y teléfono cuando trabajan desde casa. Esta es una de las novedades introducidas a última hora en la ley.
- Quienes tengan un menor o un dependiente a su cargo no tendrán que pagar cuota durante un año.
Los flecos pendientes de la ley
- Las asociaciones de trabajadores autónomos recuerdan que no se ha entrado en el paro de los autónomos. Un tema grave porque una de cada dos solicitudes para cobrar prestación se deniega.
- Otro de los problemas es el de los falsos autónomos, que afecta sobre todo a los jóvenes, que además tienen muy difícil emanciparse porque su sueldo medio está por debajo de los 800 euros. El 80% de los menores de 30 años siguen en casa de sus padres porque o no trabajan o lo hacen de forma muy precaria, lo que nos coloca a niveles de Grecia o Rumanía.
Víctor Reloba, vicepresidente del Consejo de la Juventud, recuerda que para ellos es inviable meterse en una hipoteca a 20 o 30 años, que cuando quieren recurrir al alquiler les piden un contrato indefinido o de un año como aval, algo que les obliga a retrasar decisiones vitales como la emancipación, vivir en pareja y tener hijos.
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