Un total de 4.473 personas participaron el pasado año 2018 en Málaga en los servicios de orientación, acompañamiento e inserción laboral de la Asociación Arrabal-AID para fomentar su incorporación social y laboral, sumando tanto los programas para personas desempleadas en general como las que se encuentran en situación de riesgo de exclusión social.
Un dato al que hay que sumar las 957 personas que de forma autónoma utilizaron los servicios de auto-orientación disponibles en la entidad, según ha explicado desde la asociación. De entre todas las iniciativas impulsadas por la entidad sin ánimo de lucro, destaca la Agencia de Colocación Arrabal-AID que atendió en 2018 a 2.495 personas, la mayor parte de ellas en situación de especial vulnerabilidad.
Como dato más relevante, más del 90 por ciento de las ofertas gestionadas finalizaron su proceso con éxito, con la inserción de la persona gracias a la labor de intermediación de los profesionales de la entidad, lo que sitúa el porcentaje de inserción del total de personas atendidas en un 41 por ciento.
En lo que a programas de orientación se refiere destaca por el número de personas atendidas ‘Andalucía Orienta’ del Servicio Andaluz de Empleo, con más de 976 personas beneficiarias y 10.058 horas de atención global sin tener en cuenta las 76 sesiones grupales con un total 296 horas.
Desarrollo de itinerarios personalizados de inserción, asesoramiento sobre técnicas de búsqueda de empleo e información sobre el mercado de trabajo son algunos de los puntos clave de este programa SAE del que depende también Acciones Experimentales para el Empleo, con un centenar de personas atendidas en Arrabal-AID en el último año. De ellas, 40 han logrado un empleo gracias en parte a las fase de asesoramiento, formación y prácticas en que se divide esta iniciativa que suma más de 700 horas de capacitación profesional.
Un total de 314 personas con especial vulnerabilidad se han sumado en 2018 al programa ‘Incorpora’ de «la Caixa» a través de Arrabal-AID. De todas ellas, 171 han logrado su inserción laboral gracias a la implicación de más de un centenar de empresas colaboradoras que confían sus procesos de selección a esta iniciativa de intermediación laboral.
En este programa tiene especial relevancia la labor del equipo de insertores laborales que apoya a las personas desempleadas mediante formación profesional, sesiones para el autoconocimiento, habilidades sociales y resolución de conflictos junto a las prácticas no laborales que permiten, según los casos, el reciclaje profesional o la primera toma de contacto con el tejido empresarial.