Arrabal-AID y la Consejería de Justicia e Interior de la Junta de Andalucía favorecen la integración laboral de la mujer inmigrante que ejerce la prostitución

Dar a conocer otras alternativas de empleo y formación a las mujeres inmigrantes que ejercen la prostitución que, en la mayoría de los casos, desconocen los recursos existentes. Con este objetivo compartido, la Asociación Arrabal-AID y la Consejería de Justicia e Interior de la Junta de Andalucía han unido sus fuerzas para la puesta en marcha del programa Nuevas Oportunidades y Alternativas (NOA). Una decena de mujeres han participado en esta propuesta desde su puesta en marcha el pasado mes de septiembre.

En una primera fase, NOA ha centrado sus esfuerzos en uno de los focos más grandes de la prostitución en Málaga: el Polígono Guadalhorce, incidiendo tanto en mujeres que ejercían actualmente la prostitución aunque deseaban encontrar otra alternativa laboral, como en extrabajadoras del sexo en situación de desempleo. El objetivo con todas ellas no era que mejorar su nivel de empleabilidad, para lo que han contado con el apoyo y acompañamiento de un equipo interdisciplinar formado por psicólogas, educadoras y técnicas de empleo.

El trabajo con estas mujeres ha incluido aspectos clave como la formación profesional relacionada con la hostelería, la limpieza y la atención al cliente que pudiera serles de utilidad para la consecución de un empleo aprovechando el tirón del turismo.

Además de estos cursos específicos, las beneficiarias han contado con una formación transversal para la mejora de sus habilidades sociales, el refuerzo de su autoestima y la resolución de conflictos. A todo esto hay que sumar una sensibilización empresarial, para romper estigmas y generar mayor confianza a la hora de la contratación.

La decena de mujeres participantes procedentes de Rumanía, Nigeria y Costa de Marfil han podido aplicar los conocimientos adquiridos a través de prácticas profesionales no laborales en distintos establecimientos, como restaurantes y comercios locales, que han permitido que dos de ellas lograsen insertarse en el mercado de trabajo. Todas estas mujeres han contado con sesiones de orientación socio-laboral, gestión de la diversidad intercultural, servicio de información y acompañamiento continuado para vencer cualquier miedo y evitar caer de nuevo en las redes de la prostitución.

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